miércoles, 20 de mayo de 2015

Nuevo capítulo de CHarradores Viajeros

En primavera solemos utilizar la máquina del tiempo para ir de viaje. En esta ocasión, de camino al Neolítico, nos detenemos en Lecina, en el parque cultural del río Vero, y visitamos los abrigos de Barfaluy.

Los cultivos y el inicio de actividades ganaderas facilita el inicio de asentamientos. Se empieza a cambiar la caza y la recolección, propias del paleolítico, por el pastoreo. Algo empieza a cambiar en la prehistoria.


Los habitantes de la prehistoria ya no viven en cuevas tan cerradas como la que vimos en Cantabria (Altamira), sino que utilizan estos "abrigos" naturales para resguardarse y observar el terreno desde lo alto. El arte también ha cambiado, los dibujos son muy esquemáticos y hay símbolos abstractos que no sabemos seguro a qué se refieren.

Se cambia las escenas relacionadas con la caza por dibujos más relacionados con la "domesticación". Se pinta con el dedo y con óxido de hierro (rojo) y óxido de manganeso (negro).


En Lecina se conserva una herrería, que es más moderna, por supuesto. Aunque es cierto que la edad de los metales es cercana a la conclusión de la prehistoria e indica una evolución muy importante y un "oficio" que ha sobrevivido al paso de los siglos.

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